¿MOVADEF arrincona al Estado peruano?

El Servicio Diplomático, es la primera y principal coraza que protege los intereses del Estado, frente a los intereses de otros Estados u organizaciones. La segunda coraza son las FFAA del país. No se puede designar para cargos en el servicio diplomático, a personajes solo por coincidencias  ideológicas, razones de amistad o conveniencia política, cuyos intereses no representan a la mayoría de peruanos.

Falto de reflejos la Cancillería en manos ajenas al servicio diplomático y algunos representantes políticos del Perú en el extranjero, quienes fingen ser lo que no son, irresponsablemente están permitiendo que, la organización de fachada de SL- MOVADEF, refuerce su campaña de propaganda, orquestada-qué duda cabe- desde la Base Naval y Chorrillos, para lograr la liberación de su líder.

Es que, de un tiempo a esta parte, el país ha retrocedido más que avanzado en su lucha contra el terrorismo y el TID, lo vemos todos los días con los resultados en el VRAEM. Los hijos ideológicos de la mal denominada “Cuarta espada de la revolución mundial” se han percatado de esta debilidad y están arrinconando al Estado peruano contra la pared y no le dejan margen de maniobra. Lo cual es inaceptable.

El siempre recordado Embajador Carlos García Bedoya decía  “La política exterior del Perú  obedece a criterios del Estado, responde a intereses nacionales y aquellos que corresponde a la acción de gobierno en una perspectiva de consenso nacional. Esta política externa es también una variable de la política interna”.

Lo sucedido en Buenos y D.F México puede considerarse dentro de este contexto, una grave afrenta al Estado peruano, que afecta externamente las inversiones, internamente su desarrollo y crecimiento económico. Esta campaña estaría siendo financiada por el dinero proveniente del VRAEM y de extranjeros extraviados ideológicamente, quienes se suben a un tren que no llegará a ninguna estación, porque están cerradas definitivamente, para ideologías trasnochadas y fracasadas en el planeta.

Pero, quiénes son los responsables para que nuevamente los 30 millones de peruanos, respiremos aires de inseguridad, violencia homicida y de amenazas, y como una película de Tarantino nos regrese al pasado que la mayoría había olvidado. La eliminación de la legislación antiterrorista durante el gobierno de transición de Valentín Paniagua, por exigencia de la CIDH, disponiendo la nulidad de los juicios y sentencias establecidas contra los terroristas, permitió la liberación de cientos de terroristas que hoy, son parte activa del VRAEM, SUTE-Conare y el MOVADEF.

Posteriormente el permisivo Toledo y su corte de caviares completaron el faenón con la creación de esa nefasta CVR, que hasta la fecha solo ha servido para separar a la sociedad peruana, creando íconos el “ojo que llora” y el “lugar de la memoria”, solo para un grupúsculo. Se flexibilizaron las condiciones carcelarias para los terroristas de SL-MRTA, sumado a la nula acción contra SL-TID durante el gobierno de García, han creado un escenario que les está cobrando una factura muy grande a todos los peruanos.

Recordemos que en el año 2001 se instaló la CVR con un presupuesto de 13 millones de dólares, "estuvo conformada, en su mayoría, por personas de ideología izquierdista, apoyadas por ONG’s de la misma tendencia, evidenciando desde el principio la sed de venganza contra las FFAA que desde su juventud tenían los admiradores del Comunismo, que en el Perú había fracaso en dos aventuras subversivas".

No hay duda al respecto, la legislación antiterrorista que fue establecida para la defensa del Estado peruano durante el gobierno del expresidente  Alberto Fujimori fue desmantelada y vilmente petardeada por la izquierda caviar, y las ONG´s de DDHH. La  estructura administrativa del estado infiltrada por la caviarada, mantiene coordinaciones con sus pares diseminados en los medios de comunicación, quienes sostienen una campaña mediática contra el indulto a Fujimori, subliminalmente a favor de Guzmán. 

Notas:

Caricatura. Carlin. El Movadef. COHERENCIA.pe.