Australian War Memorial

Australian War Memorial
EXTERIOR DE MEMORIA DE LA GUERRA-AUSTRALIA

domingo, 26 de septiembre de 2010

La izquierda tomará Lima sin disparar un cartucho.

La estrategia senderista de la “toma del poder del campo a la ciudad”, llevada a cabo por Abimael Guzmán y sus seguidores, iniciada en la década de los ochenta, visaba una guerra prolongada que no tenía tiempo, cuyo fin era la captura del poder, para crear nuevas estructuras, un nuevo Estado.

Estrategia que fracasó, por la extremada violencia y violación sistemática de los derechos fundamentales de los millones de peruanos, que practicó en su accionar SL; pero además, por la estrategia contrasubversiva que empleo las FFAA, PNP y el valioso apoyo de los ronderos durante el gobierno de Fujimori.

Los tiempos han cambiado, la caída del muro de Berlín el 9 de noviembre de 1989 con el derrumbe del bloque soviético, la caída de la ex URRS el 8 de diciembre de 1991, así como el final de la guerra fría y la aparición del terrorismo internacional después del 11 de setiembre de 2001, pusieron fin a las ideologías que practicaban la ex URRS y la China.

Ante esta situación, los grupos revolucionarios violentistas del planeta, se vieron desfinanciados, en crisis y presionados a cambiar su estrategia, si deseaban seguir manteniendo vigente su prédica ideológica como una panacea, utilizando las armas que les da la democracia. Hoy los antiguos enemigos, EEUU y Rusia son socios y luchan contra el terrorismo internacional.

En el escenario nacional, si buscáramos una analogía entre el ascenso meteórico de Susana Villarán de la Puente en las encuestas, después de la tacha a Kouri, con seguridad la buscaríamos en la forma cómo Napoleón Bonaparte emprendía sus campañas militares. Napoleón no solo revolucionó la táctica impulsando el empleo de nuevas maniobras, sino que en la mayoría de sus campañas, él se imponía un objetivo máximo y uno mínimo.

En el actual contexto político y de cara a las elecciones municipales de Lima, es vital e importante para los candidatos obtener una victoria mínima. Más para la candidata de la izquierda, porque no solo se juega una municipalidad importante, por la cantidad de habitantes que viven en ella y potenciales votos en el futuro, sino que, el objetivo máximo será lograr la victoria en las presidenciales del 2016.

Bonaparte tenía concepciones claras acerca de la guerra, conocía sus principios estratégicos y tácticos, por tanto preparaba todas sus acciones militares al detalle. Fundamental en sus operaciones era mantener la rapidez en los desplazamientos, el engaño y la sorpresa, la acción ofensiva o la destrucción del adversario; sin embargo, dejaba espacio al azar y a las posibles complicaciones.

En el caso de Susana Villarán candidata de la izquierda a la alcaldía de Lima, se inició con una preferencia muy baja 4%, mientras estuvo en la contienda Alex Kouri la campaña de Villarán no despegaba. Posteriormente la tacha electoral a Kouri hizo que esa preferencia subiera como la espuma, al punto que hoy es prácticamente la virtual ganadora y la nueva alcaldesa de Lima según las encuestadoras.

En todo esto ha contribuido la velocidad, sorpresa y la solidez de una campaña mediática destructiva llevada a cabo contra su oponente Lourdes Flores, desde un programa de televisión, que se emite por el canal del señor Ivcher, quien ha visitado a la señora Villarán, con seguridad parta saludarla y desearle un triunfo holgado en estas elecciones. Claro, el arma mortal electoral que se está utilizando es el programa del francotirador.

Si todo se desarrolla de manera normal hasta el 3 de octubre y la campaña de Susana Villarán no sufre un contratiempo, con seguridad se alzará con el triunfo electoral y será la nueva alcaldesa de Lima para el período 20011-2014. El 3 de octubre también nos recuerda un hecho histórico, el golpe militar de corte nacionalista del general Juan Velasco Alvarado. ¿Coincidencias para un retorno inicialmente de las izquierdas al sillón de Nicolás de Ribera “el viejo” y luego el sillón de Pizarro?

Entonces, no se está luchando por un triunfo electoral en la principal alcaldía del país, sino visando el futuro inmediato. Porque una vez logrado este triunfo que representa el objetivo mínimo, será utilizado como un bastión, como una cabecera de playa, para luego catapultar a la izquierda de todos los pelajes a la captura del gobierno central el 2016. Todo esto con los argumentos legales que le confiere la democracia. ¿Un moderno caballo de Troya o el síndrome femenino del lobo vestido de oveja?

Una campaña electoral en este siglo se ha convertido en un verdadero campo de batalla. Aunque algunos personajes se rasgan las vestiduras, apelan a la ética, o al pacto de caballeros, o en este caso al pacto de damas, no hay tal acuerdo. La historia nos relata muchos episodios en las que, la propaganda, las estrategias, los ardides, las fintas, demostraciones y engaños, han dado excelentes resultados a quienes los planearon y ejecutaron meticulosamente.

Una campaña electoral también es una guerra, que se desarrolla en un campo que es la mente del ciudadano, a quien se le bombardea con mensajes convenientemente preparados para convencerlo de su decisión o cambiar su preferencia electoral. En este nuevo campo se lucha palmo a palmo, por convencer a los ciudadanos, especialmente a los indecisos.

No se utilizan cañones, aviones, barcos ni fusiles, sino los medios de comunicación para convencer a los vacilantes. Hay un antiguo adagio que reza “en el amor y en la guerra, todo vale”. Sí, la campaña electoral municipal tiene como trofeo la alcaldía de Lima, entonces poco valen los argumentos de no utilizar la guerra sucia, que dicho sea de paso, la vienen utilizando los candidatos. Lo demás es hipocresía política y lo demuestra el chuponeo que se ha realizado a Lourdes Flores y propalado por televisión y colgado en Youtube.

Aunque la ciudad capital no es un campo de batalla, ni sus habitantes combatientes en el mejor sentido de la palabra; sin embargo, sí se convierte en un bocado apetecible para los candidatos a la alcaldía. Las dos candidatas mujeres destacan sobre los otros adversarios quienes están muy lejos en las preferencias electorales. Susana Villarán lidera a las organizaciones de izquierda de todos los tonos, entre ellos el SUTEP y PR.

Ricardo V. Lago, analista político es quien mejor ha podido expresar sobre las fuerzas que apoyan a Susana Villarán “Villarán se equivoca y por mucho al ir de la mano del SUTEP. Pierde la aureola de frescura de "outsider" política y pasa a pilotar un viaje de regreso a un pasado educativo de pesadilla. Y se equivoca, para antes de las elecciones, porque en términos netos posiblemente le cueste votos”(Correo,26-09-2010).

domingo, 5 de septiembre de 2010

Gobernantes del Perú se encargan de mantener debilitadas y famélicas a sus fuerzas de seguridad.

La Constitución del Perú dispone en su artículo 167 que, “El Presidente de la República es el Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional”. Como bien sabemos, el rol de Jefe Supremo impele el cumplimiento de funciones y responsabilidades para el logro del bienestar general y la seguridad integral de la nación peruana.

Consideramos que, este rol no se está cumpliendo con la responsabilidad que amerita y de conformidad a la Constitución vigente. No solo se está dejando desprotegida a la nación con la unilateral política de desarme, sino que, trayendo sentimientos antimilitaristas pretéritos del Apra visceral de los años 30, se quiere, pretende y exige la muerte por inanición de las fuerzas de seguridad del país, al enviar al degolladero el régimen de cedula viva.

El presidente Alan García Pérez personifica a la nación y en su calidad de Jefe Supremo de las FFAA y PNP, muestra su particular forma de agradecer, contrario a su mensaje de 28 de julio último, en que –de la boca para afuera- destacó el reconocimiento a las FFAA y a la PNP por su sacrificada lucha contra las fuerzas oscuras del mal, manifestando su interés y decisión para reestructurar y mejorar las remuneraciones y pensiones del personal militar y policial, en la situación de actividad y retiro.

Con la presentación del proyecto de presupuesto del Ejecutivo al Parlamento, se consumó una mayúscula ingratitud del gobierno a las Fuerzas Armadas y PNP de la Nación. Atrás quedaron sus promesas electorales, su mensaje a la nación de este 28 de julio, esperamos sea el último de su existencia política. Lejos, muy lejos se estancaron en una ciénaga los proyectos de la Comisión del PCM Velásquez Quesquén, las diferentes organizaciones de militares y policías en retiro. Ni el proyecto de su amigo y tocayo Alan Wagner fue considerado.

En el mencionado proyecto de presupuesto para el año 2011 ha planteado primero la desaparición de la cédula viva para soldados y policías, luego la anulación de ingreso a las escuelas de formación de estas fuerzas, lo que creará una brecha generacional muy difícil de recomponer en el horizonte inmediato y la congelación de remuneraciones de personal retirado.

¿No es esta la demostración más palpable de una actitud mezquina, prepotente y negligente contra la familia militar-policial? ¿Dónde quedó la política de integración de todos los peruanos? ¿Por qué en su calidad de Jefe Supremo busca la exclusión de militares y policías de la gran familia peruana? ¿Qué intereses bajo la mesa existen, teniendo en cuenta que faltan pocos años para la decisión de la Corte Internacional de la Haya respecto al diferendo marítimo?

Si hacemos un retroceso histórico en el tiempo, recordamos que en 1879 el General Mariano Ignacio Prado gobernaba el Perú, héroe del 2 de mayo de 1866. Ostentaba el grado de General de División que le había conferido Chile. Era compadre de Aníbal Pinto presidente chileno. Mariano Prado confió en él, creyó que por ese compadrazgo Chile no le declararía la guerra, su estupor y sorpresa fue inmensa cuando Pinto le declaró la guerra el 5 de abril de ese año. Lo demás es historia conocida.

Regresando al presente, el presidente García tenía entre manos una sorpresa para la familia militar-policial, contrario a su discurso expresado en el Congreso. ¡Aumento sí; pero, desaparición de la cédula viva, cierre de las escuelas de formación y disminución del presupuesto! Y envió a su ministra de economía, para dar la cara y enfrentar un duro vendaval, un huracán de desacuerdos, un peñón de oposiciones y un avinagrado desdén que se ha ganado de los familiares de soldados y policías.

Todo fue una gran mecida, una gran mentira, una gran maniobra de distracción que estaría sirviendo para otros fines. Los afectados por esta decisión polémica se preguntan ¿Cómo se deben estar carcajeando en el país del sur? Con seguridad burlonamente. No necesitan ningún conflicto, porque los mal llamados gobernantes del Perú se encargan de mantener debilitadas y famélicas a sus fuerzas de seguridad.

Y así, con ese gran cuajo acorde con su volumen, cada día en ascenso, pretende llegar por tercera vez a la casa de Pizarro el 2016. ¿Qué les parece?

Militares y Policías infieren que este proyecto de marras ya estaba cocinado, ¡Dios sabe desde cuándo! Todo lo demás, era lo de menos. En el Congreso, con seguridad no pasará nada. Será aprobado, pese a que hay voces apristas discordantes, que se alinearán de inmediato porque son disciplinados alanistas o apristas. ¡Qué tal bomba de tiempo que le dejará Alan al próximo gobierno!

Lo que más llama la atención es que los ministros de Defensa e Interior, aparecen como dos convidados de piedra, que aparentaron sorpresa ante tamaña y abusiva decisión presidencial. ¿Por qué ambos ministros, que se supone representan el sentir de las FFAA y PNP, de inmediato no presentaron su renuncia irrevocable? Del Ing. Rafael Rey lo podemos entender por su formación académica e ideológica, pero del general Octavio Salazar que vivió las perores épocas, no lo entendemos.

A los dos ministros les preguntamos ¿Por qué seguir esta comparsa como marionetas tapándole los huecos oscuros a este gobierno, que se ha ensañado con las fuerzas de seguridad de la nación?

En un diario de la capital ante la pregunta que le plantean a la Ministra de economía de este régimen “¿Y en verdad será capaz de convencer a congresistas que tienen una posición contraria a su proyecto? Por ejemplo, al almirante Giampietri”.

“Yo creo que sí. Si Giampietri tiene una real preocupación por el personal policial y militar en actividad debería escuchar esta propuesta. Ahora, esta no es idea mía. Hemos trabajado con el premier, con los ministros de Interior y Defensa, y con el presidente. Y él está convencido de que este es el momento adecuado para hacer esta reforma. Más claro ni el agua. Los titulares de Defensa e Interior si conocían de este nefasto proyecto.

En reciente Comunicado de la Alianza por la Reivindicación de las FFAA y PNP del 3 de setiembre 2010 expresa lo siguiente “Lo establecido en las DÉCIMA OCTAVA y DÉCIMA NOVENA disposiciones finales de dejar sin efecto todas las disposiciones aplicables al régimen del Decreto Ley N° 19846 referidas a LA RENOVACIÓN, HOMOLOGACIÓN O NIVELACIÓN DE LAS PENSIONES CON LAS REMUNERACIONES, INCLUSO EN EL CASO DE LAS PENSIONES DE INVALIDEZ E INCAPACIDAD O DE SOBREVIVENCIA DE DICHO RÉGIMEN, no sólo desconoce lo establecido en los artículos 174º y 206º de la Constitución, si no que refleja una ignorancia total de carácter legal y pone en evidencia una actitud demencial de parte del Ejecutivo frente al estado de derecho en el país”.

“El presidente Alan García ha traicionado una vez más a las FFAA y la PNP, pues ha faltado a su compromiso de hacer justicia a los que cumplieron el encargo de pacificar el país y lograr el clima de tranquilidad que necesita el país, y lo único que ha hecho es sembrar vientos y tendrá que asumir las consecuencias de cosechar tempestades, porque los cuarteles rebosan de malestar en estos momentos”.

“En tal sentido, exigimos de parte de los Señores Ministros de Defensa y del Interior, del Presidente del CCFFAA y de los Comandantes Generales de las FFAA y Director General de la PNP, una respuesta inmediata y firme, frente a este pretendido atropello de parte del Jefe Supremo de las FFAA y PNP; de no ser así EXIGIMOS su inmediata renuncia al cargo, por falta de liderazgo y lealtad al personal bajo su comando”.

Invocamos al Ejecutivo a la cordura y al Legislativo a tener en cuenta, que la aprobación de este proyecto, solo polarizará la situación social entre civiles y uniformados, lo cual es contraproducente para la seguridad integral de la nación. El gobierno está agregando gasolina a la ya debilitada sensación de inseguridad que vive el país por efectos de la delincuencia común, narco-terrorismo, TID y delitos agravados. Es necesario un momento de reflexión en los decisores, para que nuevamente analicen, recapaciten y modifiquen este proyecto. Si no lo hacen, pasarán a la historia como los dos personajes responsables de la catástrofe que afectará a las FFAA y PNP, sus familiares y lo que es muy grave a la Seguridad Nacional.