Hace poco cumplí 75 años, fue un momento para reflexionar sobre el tiempo que ha transcurrido desde mi nacimiento aquél lejano 23 de marzo de 1949 en la ciudad de Jauja, llamada y reconocida como la Primera capital histórica del Perú.
Llegado a este punto del camino, miro en retrospectiva en un rápido recorrido cómo se ha desarrollado mi vida a través de estos años, lustros y décadas. No solo para mi, con seguridad para todos recorrer el sinuoso camino por donde nos hemos desplazado cada uno de nuestros días, muchas de ellas iluminados por Luna llena, en otros momentos la luz mortecina de una luna en su fase menguante y los meandros y cochas que la misma vida nos va poniendo en el camino como apachetas esas piedritas acumuladas a la vera de los caminos.
Tuvimos muchos obstáculos y llegado el momento pudimos superarlos en base a tesón, perseverancia y entereza moral.
Bueno y aquí estamos con mi familia, para seguir en este camino que hoy se encuentra enrarecido por los escándalos políticos, la pobreza que a aumentado al 30%, observando el desprecio de los políticos por la honestidad y transparencia, valores que deberían practicar, que sin embargo, para mucha pena, no conocen estos conceptos.
Agradezco infinitamente a todas las buenas personas, amigos, familiares, conocidos que me han hecho llegar, con afecto sincero sus saludos y parabienes, en reciprocidad de mi parte y en agradecimiento, pido a nuestro Dios padre bendiga vuestros caminos, que los ilumine en sus sabias decisiones, salud, dicha y bienestar familiar para ustedes.
Les dejo este poema, que refleja todo mi sentimiento como ser humano.
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