La reacción de Colombia frente al fallo de la
Corte Internacional de Justicia (CIJ), terminó con la denuncia del Pacto de
Bogotá ante la Organización de Estados Americanos (OEA), como una medida de protesta,
por el fallo de la Corte Internacional de Justicia en el diferendo con Nicaragua.
Este fallo de la CIJ que en consideración de
Colombia, afecta su integridad territorial y no se ajusta a lo jurídico sino a
lo salomónico, de inmediato le ha
servido en bandeja de plata a Chile, para
a priori, adoptar una posición respecto
a lo que será el fallo de CIJ sobre el diferendo peruano-chileno.
En una reunión realizada en Palacio de la Moneda
en Santiago convocada por el presidente Piñera estuvieron presentes los ex
mandatarios de esta nación: Eduardo Frei, Ricardo Lagos y Patricio Aylwin. Presumimos
que el objeto de esta reunión ha sido: analizar el resultado del diferendo
Colombia-Nicaragua, tomar importantes decisiones frente a un fallo similar en
el diferendo marítimo que mantiene con Perú y marcar una posición que les
permita afrontar un frente interno que ya empieza a dividirse. Frei declaró que
no aceptarían un fallo salomónico, refiriéndose indirectamente al fallo de
Colombia-Nicaragua.
Recordemos que el próximo año (2013) es un año electoral
en Chile y las principales fuerzas políticas, tratarán de llevar agua para su
molino. Según analistas expresan que han habido serios errores en la respuesta
chilena frente a la demanda, en el campo de la inteligencia y reacción de su
diplomacia, desde su presentación a la Haya.
Otro factor con el que Piñera deberá lidiar es
con los halcones, sectores militares y civiles que buscan patear el tablero,
buscando fortalecer el frente interno de su país, buscar la unidad política, de
cara al inicio de la fase oral del litigio marítimo Perú-Chile, que se inicia
el 3 de diciembre en la Haya.
Detrás de este fallo y en la realidad chilena
hay muchos intereses económicos, especialmente en la zona en litigio, rico en
especies marínas. Hay empresarios chilenos que gracias a la explotación de
los recursos marinos, hoy disponen de una envidiable situación económica, como
es el caso del empresario Roberto Angelini presidente del grupo Copec, quienes
con seguridad se opondrán a un fallo favorable al Perú.
Al respecto la Central de Trabajadores (CUT) de
Chile ha rechazado un eventual ataque chileno al Perú, después de que la CIJ
diga su fallo, según la CUT esta acción sería muy rápida con una duración
máxima de 4 días. La CUT denuncia que “Los desplazamientos de fuerzas militares
a la frontera norte se han hecho ostensibles. Los mismos traidores que han
entregado nuestras riquezas básicas y los fondos previsionales de los
trabajadores al robo y saqueo de
las transnacionales, serán los
encargados de llamar a la parodia patriotera”.
La CUT considera que “Si las familias Angelini ,
Sarkis, Santa Cruz y otros depredadores de los recursos pesqueros del país, quieren defender sus privilegios a
perpetuidad en la zona marítima disputada ,
manden a sus hijos y nietos a una muerte segura. Su ambición y codicia
sin límites no pueden construirse a costa de los huérfanos de siempre. No lo permitiremos”.
Los peruanos esperamos confiados en
un fallo justo y de la Corte Internacional de la Haya, porque los argumentos
jurídicos de nuestro país y el equipo de primera que lo representa tiene toda
nuestra confianza, posee las fortalezas de la verdad y busca justicia, basado
en argumentos jurídicos y no busca un fallo salomónico.